El Shelby Mustang GT500 Super Snake es algo especial. Y cuando decimos especial, nos referimos a que es el Mustang más caro del mundo, y lo es por varias e interesantes razones.
Fue «concebido» en 1967 como parte de una producción limitada a 50 unidades que nunca llegó a materializarse, con lo cual, este Super Snake es el único en el planeta. El principal obstáculo fue el precio, pues 8.000$ en la década de los 60, era una inversión demasiado elevada para la gran mayoría.
Bajo su capó yace un tesoro: un motor ganador de LeMans, del Ford GT40, también conocido como V8 Big Block, que le daba una potencia de 600 CV. La velocidad máxima le acercaba a unos impresionantes 300 km/h.
Hace poco fue subastado a través de la casa de subastas Mecum Auctions por 1 millón €, muy lejanos a los 8.000 iniciales, por cierto.